La arquitectura de tierra siempre ha existido; es probablemente la expresión más temprana de la construcción permanente humana y continúa conformando los hogares de la mitad de la población mundial. Además, es el material predilecto de las grandes civilizaciones antiguas: Mesopotamia, Egipto, Valle del Indo, China, Los Andes y México, elaboraron sus primeros complejos monumentales en adobe y tierra apilada. A pesar de tan relevantes credenciales, la arquitectura de tierra sufre de un prejuicio profundo, asociado con la pobreza, insalubridad e inseguridad, en directa oposición con la piedra, material noble, símbolo social de riqueza, comodidad y permanencia. Esto ha llevado a los arqueólogos, historiadores del arte y arquitectos a desatender por mucho tiempo su investigación. Afortunadamente, la tendencia se está revirtiendo. Consorcios a nivel internacional, formados entre los años 1970 y 1990, llevaron a la creación de los proyectos Gaia y Terra, con miembros en el mundo entero, de comités especializados como el ISCEAH y el programa WHEAP de la UNESCO, los cuales desde 2006 están promoviendo la revaloración del patrimonio de tierra, tanto los monumentos como los conocimientos tradicionales asociados a él. Este volumen es el primero de varios dedicados a la arquitectura mesoamericana de tierra. En él participan arqueólogos que tuvieron que formarse en campo en el estudio de arquitectura de tierra, por la necesidad de entender la complejidad y sofisticación de los edificios que iban estudiando en sitios que abarcan del Preclásico al Posclásico, desde San José Mogote hasta Tula. Se enfatizó en la descripción de los métodos de excavación y en la descripción de los sistemas constructivos, para compartir experiencias fundamentales para otros arqueólogos confrontados con el reto. La obra termina con dos capítulos que abordan algunos de los estudios físico-químicos que pueden contribuir a la comprensión del tema y concluye con un capítulo escrito por un experto en la materia sobre los avatares de restauración de este patrimonio.